Nos encanta el amor, sobre todo cuando es propio.

Por eso, cada día es un buen motivo para celebrar que tú eres el amor de tu vida. Y que sí. El amor a primera vista existe. Y lo puedes vivir cada día mirándote al espejo. Escogiendo ese look con el que te sientes genial. Y reservando momentos para ti.

Pero ¿Qué es quererse a uno mismo?

Quererse a uno mismo tiene que ver con el autoconocimiento, el autodescubrimiento, y la autoestima. No puedes pretender tener un buen autoconcepto si no te conoces en absoluto: tus fortalezas, tus debilidades y tus emociones.

Pero para querernos lo primero que tenemos que tener claro es saber quién soy y si me gusta quién soy, porque si realmente no te conoces y tu opinión acerca de ti es mala, no vas a poder tratarte con amor.

Además, vas a acumular pensamientos negativos hacia ti, que derivaran en culpa y te llevaran a emociones desagradables, que a la vez te llevaran a pensamientos negativos, formando un círculo vicioso.

Si, por el contrario, mantienes una relación saludable contigo mismo, si eres capaz de quererte sin condiciones, entonces, te sentirás merecedor de todo lo bueno.

El amor propio proviene de la infancia y es un autoconstructo basado en la percepción de amor, respecto y valoración sobre nosotros, que recibimos de los que estaban a nuestro alrededor: familia, profesores, amigos. Si crecimos en un entorno donde reinaba el miedo, una sobre exigencia y en consecuencia mucha frustración, es probable que desarrollases un bajo amor hacia ti.

Llegados a este punto, vamos a ver como aprender a querernos a nosotros mismos:

1- Conócete: Ya hemos contado como se construye nuestro autoconcepto desde bien pequeños, ahora tenemos que reflexionar sobre ello. Para responder a la pregunta de ¿Quién eres?, tómate tu tiempo y sé observador de tu propia vida. Acéptate con tus defectos y con tus virtudes. No te infravalores: tampoco te sobrevalores.

2- Rompe con el pasado: todos hemos tenido muchas experiencias, algunas buenas y otras malas, pero quedarte anclado en ellas no te permitirá avanzar hasta tu florecimiento.

3- Trabaja en tu fortaleza emocional: es un mecanismo de adaptación que ayudará a liberarte, a reconocer tus fortalezas, tu talento. También ayudará a desarrollar resiliencia ante las adversidades que te surjan.

4- Interpreta adecuadamente tu estado emocional: ¿Qué estoy sintiendo? ¿Por qué? ¿De dónde viene? ¿Dónde lo siento?

5- Compite contigo mismo: busca nuevos retos y supéralos, además activarás tu creatividad. No dependas de motivaciones externas: depende de ti, de tus capacidades y de tus límites.

6- Busca calidad en tus relaciones: respeta las diferencias y elige bien tus compañías. Mantén relaciones sanas donde puedas expresarte libremente, sin ser juzgado y con asertividad.

"Amarse a sí mismo es el inicio de una aventura que durará toda la vida, el único amor fiel, comprensivo, que todo lo puede, que nunca nos defrauda y que siempre nos acompaña, es el amor propio" Oscar Wilde.

Y si todavía no has empezado, hoy tienes la excusa perfecta para empezar y nosotros te podemos ayudar.